sábado, 25 de julio de 2009

¡LLEGO PAPÁ!




Aunque los comerciantes hacen su esfuerzo, el Día de los Padres llega con menos bulla que el de las Madres, quizás porque en nuestra sociedad la triste realidad es que la mayoría de los hogares hoy en día están encabezados por madres solteras, verdaderas heroínas que tienen que ser mamá y papá.

Aún así veo en los niños que me son más cercanos, como la llegada de su papá es causa de algarabía, les brillan los ojitos y corren a abrazarlo diciendo ¨Llegó Papá”.

Me vienen recuerdos de mi infancia en que la llegada de papá a nuestra casa significaba para nosotros cerciorarnos de que todo estuviera en orden y ¡ay de aquel que estuviera en falta!

Mi papá expresaba a su manera su ternura de padre hacia nosotros porque en aquel entonces era el papá quien asumía el rol de corregir y enderezar, hoy en día creo que hasta eso le han dejado los hombres a las mujeres.

A él le debo mi afición a la lectura pues fue en su pequeña biblioteca donde me hice amiga de las letras, con libros tan difíciles como La Ilíada y la Odisea de Homero,Las Vidas Paralelas de Plutarco, los Diálogos de Platón o Las Aventuras de Telémaco. De ahí salieron nuestros nombres que me vi obligada a repetir cada inicio de curso durante la Primaria, ya que no sé porqué a mis profesoras les cogía el primer día de clases con decirme que me parara a decirlos delante de todo el curso.

A papá le encantaba también ponernos a resolver problemas matemáticos mentalmente a la hora del almuerzo, nada de estar haciendo la mínima sumita con calculadora como ahora.

Para el Día de Reyes no he conocido a nadie que disfrutara tanto de la sorpresa que nos causaba encontrar nuestros juguetes al pié del árbol de Navidad. El se esmeraba en que, aún viviendo nosotros en Bonao, tuviéramos las mejores muñecas, bicicletas y todo tipo de juegos para que no echáramos en falta los que repartía Petán en el pueblo, los que nosotros teníamos terminantemente prohibido aceptar, pues mi papá fue un antitrujillista rotundo, además de ser la persona más honesta y seria que he conocido en mi vida.

Me lleno de orgullo cuando he visitado en Santo Domingo los pocos comerciantes de su época que todavía le sobreviven, quienes eran suplidores de sus tiendas de Bonao, pues cuando se enteran de que soy su hija expresan alabanzas y reconocimiento a su integridad.

Oriundo de Gurabo, Santiago, hijo de campesinos, fue con su familia a radicarse en Bonao, hizo sus estudios de bachillerato en La Vega, y fue un autodidacta que podía dialogar con cualquiera prácticamente de todo tipo de temas. En una época en que pocos viajaban, y mucho menos la gente de Bonao, viajó a Argentina y tuvo la visión de enviar sus hijos a hacer carrera a Europa, en mi caso al Canadá, en tiempos que a poca gente se le ocurría enviar sus hijos a estudiar sin becas, si no en base a la pequeña fortuna que hizo chele a chele.

Desde este ¨sitio¨ como dice mi seguidor Juandoliandero de España, Antonio Segura Aznar, hago en memoria de mi padre Amado Frías, que siendo un comerciante de Bonao me llevó con las alas de su imaginación a ser ciudadana del mundo, un reconocimiento muy especial a todos los padres en su día: a mi esposo, a mi hijo Carlos, a mis yernos Nicolás y Juan Manuel, a Raúl Ruiz mi compadre y papa sin acento, a mis hermanos, cuñados, sobrinos y amigos, en fin a todos los papás que han aprendido también a ser mamás.

2 comentarios:

  1. Lesbia Frias Me encanto asi tambien me siento bien orgullosa de mi padre,igual las personas q lo conocieron me hablan super bien de el de lo honesto que fue, gracias

    ResponderEliminar
  2. Esmirna Frias Me parecio excelente, yo no lo habia podido leer porque he estado un poco atareada, pero me encanto, le voy a sacar fotocopias, para los que no lo hayan visto lo leean.

    ResponderEliminar